Reseña: Mestiza, de Jennifer L. Armentrout (Covenant #1).

Título: Mestiza.

Autora: Jennifer L. Armentrout.

Saga: Covenant (1 de 5)

Editorial: Kiwi.

Páginas: 347

Encuadernación: tapa blanda con solapas.

Adaptación cinematográfica: Han comprado los derechos para hacer una serie.

Sinopsis

¿Serías capaz de matar a alguien que amas?

Los hematoi provienen de la unión entre dioses y mortales: y los hijos de dos hematois de sangre pura tienen poderes divinos. En cambio, los hijos de hematois y mortales, no. Los mestizos solo tienen dos opciones: entrenar para ser centinelas, cazando y matando daimons, o convertirse en sirvientes en las casas de los puros. Alexandria prefiere arriesgar su vida luchando antes que limpiar retretes, aunque de todas formas, puede que termine en los barrios bajos.

Hay reglas muy estrictas que los estudiantes del Covenant deben seguir. Álex tiene problemas con todas, pero especialmente con la regla número 1:

<<Las relaciones entre pura sangre y mestizos están prohibidas>>.

Por desgracia, Álex se siente atraída por Aiden, un pura sangre irresistible. Aunque enamorarse de Aiden no es su mayor problema: mantenerse viva hasta su graduación en el Covenant y llegar a ser centinela sí lo es. Si no cumple con su deber, se enfrentará a un futuro peor que la muerte o la esclavitud: se convertirá en un daimon y Aiden será su cazador. 

Y eso, no es nada bueno.

Opinión Personal

Vale. Antes de empezar con la reseña, quiero decir que esta es solo mi humilde opinión, y que por tanto debéis respetarla como yo respeto la vuestra. Que no me guste a mí no implica que no pueda gustaros a vosotros, ¡al contrario! Incluso puede que os guste mucho más que a mí, pero, como ya he dicho, esta es mi opinión y debéis respetarla. 
Bien. Tenía que decirlo, porque ya me han venido unos cuantos fans indignados con las reseñas de otros libros, así que... 
En fin, eso es todo, ya puedo empezar.

Conociéndome a estas alturas, ya sabréis que no es una sorpresa lo mucho que adoro a esta autora por la que es mi primera saga favorita (la saga Lux), y hace mucho tiempo, cuando leí Obsidian por primera vez (a principios del año pasado, si no recuerdo mal), me puse a investigar y ver qué otros libros había escrito la autora, y me topé con este, el cual vi que estaba traducido al español y por ello me puse muy contenta. Sin embargo, cuando fui a varias librerías a comprarlo, nunca lo encontraba, pues a pesar de que preguntaba a los libreros, ellos me decían bien que ese libro no existía, o que la editorial no lo había traído a Canarias o que o salía de la librería en ese mismo instante o llamaban a la policía, por la mirada de loca asesina que les echaba.

Edición antigua.
Eso sí, la portada de Puro es horrible.
Totalmente.

Así que, al final, mi madre me encargó el libro en la página de la editorial para echármelo por Reyes de este año, y aunque no me había olvidado del libro (pues todavía estaba intentando conseguirlo y nada, no estaba nunca. Gracioso el hecho de que días más tarde encontrara la segunda y tercera parte en una librería a la que fui varias veces y en la cual me dijeron que Mestiza no existía, ¿no creéis? :-D Aunque bueno, la primera parte seguía sin estar, pero en ese entonces tampoco lo estaban ni la segunda ni la tercera, pues no tenían ni idea de que esa saga existía, como ya dije antes), sí que lo había hecho de la sinopsis. Ya había leído en varias reseñas que el libro era muy parecido a Vampire Academy -saga que he leído hasta el cuarto-, así que lo confundí todo y pensé que el libro iba sobre vampiros y no dioses y semidioses. Total, la sinopsis era muy parecida también, o sea que... Eso sí, me gusta que la editorial haya decidido reeditar las portadas. Aunque la antigua no me desagradaba del todo, esta es preciosa, y es la original, así que me alegro de que mi madre me regalara esta edición y no la anterior.

En fin, los que hayáis leído Vampire Academy ya sabréis de sobra que la sinopsis tiene de original... poco. Poquísimo, vaya, aunque me entristezca decirlo, pues le tengo mucho cariño a la autora, pero así es. ¡Si parecía que tenía dicho libro al lado y que lo estaba pasando todo a su ordenador para después modificar unos cuantos términos y listo, por el amor de...! ¿Pero se puede saber EN QUÉ DEMONIOS estaba pensando? La verdad es que se me hace realmente difícil el pensar que la autora no conociera Vampire Academy, puesto que dicha saga es muy famosa, por lo que veo, pero bueno... todo es posible, supongo.
Como ya he dicho, antes de abrir el libro era consciente de que le encontraría muchas similitudes a la otra saga, ¡pero no sabía que tantas, leches! A ver, sí, sabía que la estructura en la que estaban formados los semidioses era igual a la del otro libro: Puros, los que están en la clase más alta, por así decirlo, lo que en el libro de Vampire Academy serían los moroi; los mestizos, que son los de en medio, o sea, los que para Vampire Academy serían los dhampir; y los daimons, que son los malos malosos de la historia, o sea, lo que para Vampire Academy sería los strigoi, los vampiros malos... Vale, está bien, estaba avisada al respecto y por tanto sabía que, aunque me fastidiase un poco, podía dejarlo pasar. Pero es que la cosa no se acaba ahí, señores, ¡hasta los personajes son iguales! Y además de eso tienen muchas más cosas relacionadas las dos sagas, las cuales no os voy a decir porque si no igual os hago spoiler. Y eso es el mal en su estado más puro.
A ver, los personajes. No recuerdo haber sido advertida de que la protagonista era parecida a Rose Hathaway, pero sí, la verdad es que lo es. No llega a ser idéntica a Rose, pero se le parece en varias cosas, y a mí Rose no me cae bien, así que eso hizo que me mosqueara ligeramente al principio del libro. ¡Pero bueno! Como hace mucho tiempo que no leo a Rose y, por tanto, no la tengo tan... fresca, por así decirlo, decidí hace algún tiempo que, cuando leyera el quinto libro de Vampire Academy, intentaría volver a leer a Rose con la mente abierta, a ver si me cae mejor, y con esta protagonista no iba a ser menos (además, no la había leído nunca, por lo tanto no tenía excusa), así que me dije que le daría una oportunidad. Y la verdad es que no tengo mayor queja sobre ella, a pesar de lo que ya he dicho, pues no me gustó nada que se pareciera a Rose tanto físicamente como en la personalidad. Sin embargo, esta la veo más... ¿tranquilona, quizá? ¿Menos arrogante...? No lo sé. El caso es que esta protagonista, Álex, no me ha disgustado. Tampoco me ha encantado, vaya, pero ha estado bien, normal. Creo que hasta alguna vez sonreí con algo que dijo.
El problema fue cuando conocí a los demás personajes. Esta era mi cara antes de conocer a los personajes:

Bueeeeno, no está mal. Ni fu ni fa, la verdad, pero tampoco llevo leído tanto, así que no puedo opinar, supongo.

Y al conocer a los personajes:

PERO ÉSTO QUÉ EEEEEEES, ÉSTO QUÉ EEEEEEEEEEES.

Ya empezamos con mal pie... ¡a mí no me habían avisado sobre esto!

Y es que, a mi parecer, los personajes se parecían mucho a los de Vampire Academy, aparte de que algunos me parecía que no tenían mayor transcendencia en la historia, y además habían bastantes, por lo cual me olvidaba cada dos por tres de quién era quién y me terminaba liando. Esta era yo cada vez que trataba de recordar quién era quién:

Mind blowing en su estado más puro, sep.

Y cuando iba a conocer a nuevos personajes, pasé por dos etapas. Primero fue esta:

Pero... pero... PERO ¿¡OTRO MÁS!? ¿¿¿EN SERIO???

Y después, esta:

Me estoy liando con los nombres...

Quizá, si los cuento en total, no serán tantos, pero qué queréis que os diga, para mí me fue difícil recordarlos todos, la verdad.

Pero bueno, aunque eso me molestara un poco, no fue lo que me hizo enfadar. Lo que me hizo enfadar realmente fue cuando los conocí un poco más a todos. ¡Cada personaje me recordaba a un personaje de la otra saga! Álex, como ya sabéis, a Rose; Caleb, el mejor amigo de Álex, me recordaba algo a Mason, el amigo de Rose (tampoco era una copia idéntica, vaya, pero habían cosas que sí me recordaba a él...); Deacon, a Adrian (un personaje que sale en el segundo libro de la saga. Tranquilos, no es spoiler); Lea, a Mia (la pija del grupo y la que se lleva mal con la prota)... etc. No sabía si ponerme triste o enfadarme, y terminé por enfadarme. Vamos, que interiormente estaba algo así:

  

Los que quizá no me recordaron mucho a los personajes de Vampire Academy fueron Aiden, el entrenador de Álex, y Seth. Aiden no me disgustó, estuvo bien, pero la verdad es que ahora que me pongo a recordar siento bastante indiferencia. Y no, no se parece a Dimitri, gracias a los dioses. 
Seth sí que me gustó un poco más, no os voy a decir quién es porque prefiero no desvelaros nada, pero no me ha recordado a ningún personaje de Vampire Academy en particular. Me dio un poco de curiosidad y, lo que leí de él, me gustó, o sea que espero que en las siguientes entregas pueda saber un poco más de él, que yo quiero leerle más y en este libro creo recordar que no aparece tanto como a mí me gustaría (aunque tampoco me hagáis mucho caso).

Y dioses, la edición. La edición. 

No sé si hablar de la edición o directamente ir a deprimirme a un rinconcito.

Vamos a ver, también había sido advertida de que, en la edición antigua, habían muchos errores de traducción y faltas ortográficas. Pero entonces la editorial Kiwi decidió sacar una nueva edición, con la portada original (que, por cierto, eso fue una gran elección), y, supuestamente y según oí, dijeron que volverían a corregirlo. Ya, bueno, pues si realmente la volvieron a corregir, no quiero ni imaginarme cómo estaba el libro en la edición antigua. ¡Parece que no la han corregido, por los dioses! Ni siquiera había llegado a la página noventa y ya me encontraba muchísimos errores ortográficos, tantos que a veces me terminaba cabreando y cerraba el libro. Y entonces estaba tal que así:

No sé qué libro ha sido con el que más errores me he encontrado, si éste o Marcada, y la verdad es que eso me es bastante deprimente, sobre todo teniendo en cuenta de que, según lo que he oído, lo volvieron a corregir antes de publicarlo. Ésta era yo cada vez que me encontraba un error ortográfico (que era, prácticamente, cada dos o tres líneas):

Esto no me puede estar pasando... No otra vez, no a mí...

NOOOOOOOOOOOOO, POR FAVOR, NOOOOOOOOOOOOOOOOOOO.

¡¿NO SE SUPONÍA QUE LO HABÍAN CORREGIDO?! ¿ÉSTO QUÉ EEEEEEES??

¿Notáis las olas de odio que irradio? ¿Lo notáis? :-)))))

El libro no me enganchó, la verdad. Tampoco se me hizo lento, pero engancharme no me enganchó. El caso es que creo que quizá continuaré con la saga. ¿Por qué? Pues porque siento curiosidad por los Apollyon, ya que es lo único original que le he encontrado al libro. Lo único. Y ahí lo dejo.

La historia en sí, si dejo de compararla con Vampire Academy (que, creedme, es muy, pero muy difícil), no está mal. Quizá hasta le habría puesto un 3, pero, sintiéndolo mucho, no he podido evitar sentirme molesta con tantas cosas similares a la otra saga. Quizá a vosotros os puede gustar si habéis leído la saga de Vampire Academy, os ha gustado y no os importaría volver a leer la misma idea solo que con dioses y semidioses. No sé, quizá os podría gustar. O bien os cabrearíais, como yo. No sé, no sé.

¡Por cierto, casi se me olvidaba! ¿Creéis que es normal que, alguien que se ha criado con la religión de la mitología griega, la cual es politeísta, diga exclamaciones como: "¡Por el amor de Dios!"? Se podría atribuir a que ha pasado dos años fuera del Covenant (no es como si esta parte también me recordara a Vampire Academy ni nada, qué vaaa...), y que, por tanto, quizá se le han podido pegar algunas cosas de los humanos, pero aun así... en fin, que no sé que pensar, si es otro error de traducción o es que realmente se le ha pegado dicha expresión. ¿Vosotros qué creéis?

He estado pensándolo y dudando en qué nota ponerle, y al final he decidido que le pondré...

Y la verdad es que estoy siendo benévola, porque pensé hasta en ponerle menos.